JORGE SALAS CHAVEZ no es santo de la devoción del gobernador de Jalisco. Enrique Alfaro no tiene un pelo de tonto y como uno de los hombres más y mejor informados en el poder sabe perfectamente lo que acontece en el municipio costero de Cihuatlán, donde el Partido Movimiento Ciudadano esta en serio riesgo de perder las elecciones locales del próximo año.
A la cúpula del gobierno estatal y grupo alfarista no le falta información sobre lo que ha hecho el presidente municipal desde que asumió el cargo.
Una tras otra. La verdad es que trae un desorden no solo en lo político y partidista, también en lo que se refiere a la administración pública, sobre todo en el área de la hacienda pública, la tesorería a cargo de Silvia Cervantes, para que entiendan mejor.
Es así como con los pelos de la burra de la mano, Enrique Alfaro sabe perfectamente que el ex priista Jorge Salas y su grupúsculo de advenedizos encabezados por el secretario particular Efraín Corona Vargas y el traicionero del secretario general Adán Mora, incluido el inepto del oficial de padrón y licencias Armando Villaseñor y, la ex directora del DIF Blanca García, no tienen garantizado un buen futuro político.
¡CON ESTO TERMINO!… Resulta irónico que cualquier verdadero líder social le garantiza más votos a Movimiento Ciudadano que todo el grupo de rémoras que ya hartaron a la comunidad cihuatlense protagonizando capítulos de una novela política en la que sale a relucir lo peor del PRI y PAN.
Mire las fotografías y no se diga más.



