Esta semana fue de lluvias por el temporal en el Pacifico mexicano. Después de caer las primeras aguas del cielo, a Cihuatlán llegó una tormenta que afectó directamente al de por si derrotado presidente municipal Jorge Salas Chávez.
Un grupo de directivos, maestros, padres de familia y alumnos de dos escuelas primarias salieron a las calles a manifestarse atravesando las principales avenidas de la cabecera municipal hasta llegar al palacio de la calle Juárez, donde un grupo de policías y el secretario particular Efraín Corona Vargas, impidieron el paso y el ingreso al edificio público.
Desde la calle, bajo los rayos mañaneros del sol, los manifestantes de la comunidad escolar exigieron y gritaron que el presidente Jorge Salas diera la cara y bajara a dialogar.
Demostrando su poderío, su arrogancia y actitudes represivas, el secretario particular hizo esperar por minutos y más minutos a los desesperados manifestantes, entre ellos, decenas de menores de edad, a quienes se les impidió el paso con los policías, como en otras ocasiones.
Por fin, al verse fracasado y rebasado el secretario Corona Vargas, las autoridades del Gobierno Ciudadano accedieron a que el contingente de manifestantes ingresara al edificio público, donde el presidente Jorge Salas dejó su oficina y salió a la sala de reuniones anexa.
En el dialogo hubo de todo. Acusaciones. Reclamos. El presidente Jorge Salas no aguantó las críticas en su cara y en momentos perdió la compostura de un digno representante del pueblo, levantando la voz y las manos, sin importarle estar junto a los pequeños escolares que se sumaron a la protesta para que les entreguen sus salones de clases de las escuelas primarias, donde es evidente el retraso de la obra pública.
Tras la manifestación pública, el alcalde se trasladó a la “escuela de los tanques”, la Gregorio Torres Quintero, para supervisar el avance de las obras de mejoramiento.
Para entonces, ya se había exhibido como un gobernante insensible, quizás todavía ofuscado por su vergonzosa derrota política que le impidió su reelección.
En las redes sociales, las reacciones fueron criticas al grado de sugerirle que de una vez se retire de la presidencia municipal, porque ni regiduría pudo alcanzar.








