Dos policías de la Comisaría de Seguridad Pública de Puerto Vallarta fueron suspendidos por seis meses, acusados y procesados por abuso de autoridad, tras participar en un desalojo.
A principios del año, los policías sacaron de una vivienda a una familia, señalandolos injustificadamente de allanamiento de vivienda.
Entre los desalojados había una mujer embarazada y menores de edad.
Se presentó la denuncia correspondiente ante la Agencia Regional de la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción en Puerto Vallarta.
Los policías municipales fueron sancionados por efectuar el desalojo sin orden judicial.

